Última actualización: 23. junio 2020

¡Hola! Te saludamos de nuevo con mucho entusiasmo desde The Hidden Portal. ¿Tuviste tiempo de experimentar con el no make-up make up del que hablamos la semana pasada? Recuerda que si aún queda alguna duda en el aire, estaremos encantadas de resolverla.

Esta semana hemos decidido aprovechar que ya entramos en el tema del maquillaje para seguir por el mismo camino. La mayoría de las que nos maquillamos con frecuencia tenemos una rutina ya establecida. ¿Alguna vez te has preguntado si hay una forma más eficaz de aplicarte los cosméticos, quizás con mejores resultados?

Bueno, no queremos asustarte y que pienses que llevas toda una vida maquillándote mal. Pero como siempre se puede mejorar, hoy te compartiremos la que –según los expertos- es la manera de maquillarse correctamente. Y claro, con el orden de productos que corresponde. ¿Lista?

  1. Arrancamos con la base de maquillaje:
    Antes de este paso es importante que tengas tu rostro limpio e hidratado. Ahora, con el tono que mejor se ajuste a tu piel, aplica una cantidad moderada de base en tu nariz, en el centro de tu frente, las mejillas y la barbilla. Extiéndelo en tu rostro con las yemas de tus dedos hasta lograr un tono uniforme, sin marcar poros y llegando hasta donde empieza el cabello.
  2. El momentum del corrector:
    Quizás por ahorrar tiempo hayas prescindido de este elemento salvavidas, pero te recomendamos reconsiderarlo. Elige un tono más claro que tu base de maquillaje, pero, ¡ojo! tampoco un color fantasmal. Si tus ojeras son marrones, busca un corrector más anaranjado, Si son azules, uno ligeramente rosa. Aplícalo en el contorno de tus ojos con toquecitos sutiles para difuminar.
  3. Y se hizo la luz con el iluminador:
    Añade ese toque de luz que hace la diferencia. Aplica el iluminador en los pómulos, el arco de las cejas y en los lados de la nariz. Esto ayuda a disimular nuestras facciones menos perfectas. Porque de imperfecciones nada, ¿a que no?
  4. Perfecta con o sin sol con polvos bronceadores:
    Llegó la hora del contouring con los polvos de sol. Elige una brocha gorda para que queden bien difuminados y el efecto no sea excesivo. La clave es aplicarlos en la línea de la mandíbula, justo bajo los pómulos y en la sien. Si te interesa aprender más sobre los polvos compactos, consulta nuestro texto.
  5. Añade un toque saludable con el colorete:
    Hay quienes eligen entre los polvos bronceadores y el colorete, pero no hay por qué hacerlo. Usa el tono que más se acerque al que emanas cuando te sonrojas. Aplícalo sobre tus pómulos haciendo movimientos circulares en un par de pasadas y, nuevamente, con una brocha gorda.
  6. Anticípate al brillo con los polvos matificantes:
    Con este paso nos aseguramos de que lo único que brille en ti sea tu belleza. Elige unos polvos con acabado mate para sellar el efecto de los productos previos en la piel. Usa una brocha y procura no exagerar con la cantidad para que no se vea la piel cuarteada.
  7. Dale protagonismo a tu mirada con las sombras de ojos:
    Hay una infinidad de opciones y efectos que puedes lograr según la ocasión y la intensidad que busques en tus sombras de ojos. Para el día a día puedes optar por algún tono nude. Experimenta y elige el color que mejor vaya contigo. Puedes usar nuestro artículo sobre este producto como referencia.
  8. Dale a tus ojos la definición que necesitan con el eyeliner:
    Imposible saltarse este paso si lo que quieres es destacar. Perfila tu mirada según el impacto que quieras causar. Lo más común es aplicárselo debajo del ojo desde el interior hasta el exterior, pero ¿por qué siempre hacer lo común? Aprende más sobre los usos de este producto con nuestro artículo.
  9. Ponle el toque final a tu mirada matadora con máscara de pestañas y lápiz de cejas:
    Ahórrate las pestañas postizas y elige una buena máscara de uso diario. Haz movimientos rotatorios desde la raíz, peinándolas con cuidado para evitar los desagradables grumos. Complementa tu mirada con un lápiz de cejas que se asemeje a tu tono, siguiendo su forma natural con pequeños trazos. Asegúrate de rellenar las zonas menos favorecidas y pobladas y, ¡ya estás!
  10. Cierra con broche de oro con el lápiz de labios:
    Este último toque nunca se debe obviar.  Puedes usar un perfilador para darles más forma a tus labios y un efecto de mayor duración. Rellénalos con tu barra favorita desde el centro del labio de arriba hacia los extremos. Y, ¡perfecta!

Esperamos haberte explicado el proceso con la mayor claridad posible. En temas futuros ahondaremos en algunos de estos pasos para revelar más trucos. Por lo pronto, sigue con nosotras la próxima semana para aprender a leer una etiqueta de un producto (todos sabemos que no siempre es fácil).

¡Hasta pronto!

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